La Cámara de Diputados tendrá la próxima semana 48 horas frenéticas entre el martes y miércoles por el pedido de interpelación al jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y funcionarios del Gobierno como así también la reunión constitutiva de la comisión especial investigadora del escándalo de la criptomoneda $LIBRA que involucra al presidente Javier Milei.
Desde el Gobierno dejaron trascender que Francos está confirmado que enfrentará la interpelación y se presentará junto al ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, aunque ven escasas posibilidades de que al equipo se vaya a sumar el jefe del Palacio de Hacienda, Luis “Toto” Caputo, y menos aún el presidente de la Comisión Nacional de Valores (CNV), Roberto Silva.
Frente a este panorama, desde la oposición amenazan con acusar de incumplimiento de los deberes de funcionario público a aquel ministro que se niegue a responder a los requerimientos de los diputados. “Es su deber presentarse ante la Cámara”, respondieron desde el bloque de Unión por la Patria (UxP).
Otro diputado fundamentó que el ministro de Economía tiene que venir porque tiene que explicar si estaba al tanto del lanzamiento de una criptomoneda y cómo iba a favorecer a las pymes. Es que en el mensaje de promoción de la memecoin, Milei dijo que “este proyecto privado se dedicará a incentivar el crecimiento de la economía argentina, fondeando pequeñas empresas y emprendimientos argentinos”.
Durante la sesión informativa del jefe de Gabinete de este miércoles, Miguel Angel Pichetto, presidente del bloque de Encuentro Federal, reclamó a Francos la presencia del ministro de Economía. “Nunca ha venido”, reprochó el legislador, para acusar a Caputo de seguir “esta cultura del desprecio del Congreso”.
El kirchnerismo mantiene contacto con el bloque de Democracia para Siempre, que tiene como referentes a Facundo Manes y Martín Lousteau; Encuentro Federal y la Coalición Cívica para definir el mecanismo que se utilizará en la interpelación. La intención de la oposición es llegar con un esquema táctico definido.
En este sentido, explicaron que la sesión será de las características de los debates habituales de la Cámara y se prevé que el jefe de Gabinete podrá estar junto a los ministros que fueron citados por el cuerpo.
La intención de la oposición es apuntar a un debate dinámico y se le dará una hora a cada uno de los interpelados para que expliquen y den la versión oficial sobre el caso $LIBRA. Para que sea una sesión ágil, la oposición hará preguntas directas evitando largas introducciones.
Desde el oficialismo trataron de bajarle el tono a la sesión emplazada para el próximo 22 de abril aunque la preocupación está puesta en lo que pueda ocurrir un día después cuando se realizará la reunión constitutiva de la comisión especial investigadora del caso $LIBRA.
La comisión quedó en una situación compleja porque está integrada por 28 miembros con 14 diputados del oficialismo y aliados y 14 de la oposición más dura. Los libertarios cuentan con el acompañamiento del PRO, la UCR, los radicales “con peluca” e Innovación Federal. Unión por la Patria, Encuentro Federal de Pichetto, Democracia para Siempre de Manes, la Coalición Cívica y la izquierda, conforman la oposición.
Por ahora se descarta la posibilidad de convocar a una sesión para el próximo martes con la intención de hacer una interpretación de la resolución aprobada por la Cámara que impulsa la creación de la comisión.
La apuesta es convencer a alguno de los radicales o de Innovación para dar vuelta la jugada del PRO y LLA que armaron interbloques para ganar una silla más cada uno en la comisión y alcanzar un número que bloqueó la comisión al quedar empatada la distribución de fuerzas.
Algunos radicales no están cómodos con tener que apoyar a Milei en este escándalo y esto lo tiene preocupado al oficialismo que sabe que puede tener alguna baja a la hora de tomar decisiones. Pero entre los libertarios también saben que los diputados del bloque de Pichetto como los de la bancada que preside Pablo Juliano no se van a plegar a todas las medidas que proponga el kirchnerismo.
Tal como informó este diario, la creación de la comisión provocó diferencias en el bloque de Unión por la Patria, ya que algunos de sus miembros remarcaron que fue un error haber permitido que se incluya a los interbloques para definir su integración. Pero también cuestionan haber modificado un artículo que le otorgaba la presidencia al kirchnerismo. Es que ahora la conducción de la comisión se definirá en una votación de los miembros de la comisión. Pero al estar empatados es difícil que se pongan de acuerdo en el presidente.
Los libertarios reclaman la presidencia. En el PRO, las posiciones están divididas porque unos dicen que le corresponde a la oposición y otros que debe ser para el oficialismo.
En la oposición, Unión por la Patria busca defender su condición de mayoría, pero el resto de sus socios presionan para que sea alguien del centro y postulan a Oscar Agost Carreño o Nicolás Massot, pero ambos nombres son resistidos por el oficialismo y sus aliados. A los radicales los bajaron de la pelea por la propia interna que tiene el partido centenario.
De acuerdo a lo explicado por los diputados, después de la elección de las autoridades de la comisión especial, se debe avanzar con el reglamento por el que se regirá y luego definirá el plan de trabajo.
Fuente: clarin.com