La Corte Suprema de Estados Unidos ordenó detener hasta nueva orden las expulsiones de venezolanos, ante los recursos de emergencia interpuestos por una organización que denuncia que el Gobierno de Donald Trump intenta expulsar a más migrantes a El Salvador.
El Supremo estadounidense bloqueó las expulsiones de venezolanos -detenidos en un centro para migrantes en Texas- bajo la ley de Enemigos Extranjeros de 1798. Hasta ahora, la ley se había usado solamente durante la guerra de 1812 contra el Imperio británico y sus colonias canadienses, así como en las dos guerras mundiales del siglo XX.
“Se ordena al gobierno no expulsar de Estados Unidos a ningún miembro de la supuesta clase de detenidos hasta nueva orden de esta corte”, decretó el máximo tribunal.
La demanda
En su orden, que tuvo dos votos en contra, los jueces del Supremo actuaron tras el recurso interpuesto por la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU), que alegaba que las autoridades migratorias parecían querer reiniciar las deportaciones en virtud de la Ley de Enemigos Extranjeros, que Trump invocó el pasado 14 de marzo para expulsar a cientos de venezolanos a los que acusa de pertenecer a la organización criminal Tren de Aragua.
“Es necesaria una intervención de emergencia para (…) prevenir un daño irreparable y permanente a los demandantes”, indicó la ACLU en el recurso ante el Supremo. La organización argumenta que el Gobierno Trump está ignorando una decisión del Supremo al querer expulsar a los migrantes sin “notificar (a sus abogados) o darles una oportunidad de ser escuchados”.
La Corte Suprema emitió un fallo la semana pasada que permite continuar con las expulsiones a una megacárcel en El Salvador sólo si se notifica el traslado a aquellos que van a ser deportados y se les da un “tiempo razonable” para apelar la decisión.
El Gobierno de EE.UU. llegó a un acuerdo con el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, para poder enviar a migrantes detenidos en EE.UU. hacia el Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot), una prisión de máxima seguridad sobre la recaen denuncias de abusos a los derechos humanos.
Como parte del trato, del que no se conocen detalles específicos, Washington pagará a El Salvador seis millones de dólares anuales para sostener el sistema carcelario del país centroamericano.
En total, EE.UU. ha enviado a más de 200 migrantes, en su mayoría venezolanos, a esta cárcel, acusándolos de pertenecer al Tren de Aragua, una banda delictiva transnacional que surgió en una cárcel de Venezuela.
Sin embargo, según un análisis publicado la semana pasada por el portal Bloomberg, un 90 % de los más de 200 hombres que EE.UU. tiene encarcelados en El Salvador no tienen antecedentes penales en territorio estadounidense.
Fuente: pagina12.com.ar