“Ayudemos a los que ayudan” es el lema con el que el Ministerio Público Fiscal viene trabajando de manera sostenida con diferentes instituciones de bien público, apoyando, por medio de la implementación de reparaciones integrales, los distintos proyectos que éstas llevan adelante en su servicio a la comunidad.
En esta oportunidad, el ministro Edmundo Jiménez visitó la localidad de Río Seco, donde funciona el “CAAC San Cayetano” (Casa de Atención y Acompañamiento Comunitario) en el barrio La Granja, donde se realiza un trabajo preventivo.
Esta institución, que está bajo la órbita del SEDRONAR, empezó a funcionar en el año 2023, en un espacio cedido por el Comedor San Nicolás. Aquí se lleva adelante un merendero (de lunes a viernes) al que asisten alrededor de 80 de niños, adolescentes y jóvenes que, a través del taller de cocina, elaboran pan casero y facturas.
También se realizan talleres de guitarra, arte y fútbol. Se trata de un espacio destinado al abordaje de diferentes problemáticas de consumo y adicciones, en un trabajo coordinado con un equipo técnico conformado por psicólogos sociales encargados de los grupos de contención, y una psicóloga clínica enfocada en la atención personalizada.
En el emotivo encuentro, el jefe de los fiscales dialogó con los asistentes y destacó la tarea que lleva adelante el establecimiento en el seno de su comunidad. Asimismo, hizo referencia al trabajo que realiza el Equipo de Coordinación de Políticas Reparatorias (ECPR) del Ministerio Fiscal en la cesión de recursos que provienen de causas penales.
“Detrás de cada reparación penal hay un proyecto con impacto social y restaurativo” precisó, para luego firmar el acta de entrega de un horno pizzero, un freezer, elementos de cocina, vajilla y artículos deportivos, objetos que fueron recepcionados por el titular del centro comunitario, Nicolás Arévalo.
Precisamente este último, agradeció la ayuda recibida por considerarla fundamental para la continuidad de las acciones que vienen desarrollando: “Lo que hacemos es trabajar en la atención y prevención de consumos problemáticos en el barrio de distintas formas. El acompañamiento tiene que ver no sólo con atender las adicciones, sino también la multicausalidad y la vulnerabilidad de mucha gente de nuestra comunidad.
En esta oportunidad hemos recibido elementos, tanto de cocina como deportivos, que para nosotros y nuestras talleristas son una gran herramienta que nos da la posibilidad de poder llevar adelante estas actividades que de otra manera nosotros no podríamos. Lo que nos permite avanzar en esta forma de trabajar, atendiendo la demanda de todos los chicos que vienen acá”, manifestó Arévalo.