La Verificación Técnica Vehicular (VTV) en la provincia de Tucumán ha experimentado un incremento significativo que ha sorprendido a los ciudadanos. Este aumento, que supera el 100%, ha impactado directamente en el costo de renovar la oblea de vehículos livianos, elevando el precio de $10.000 a $20.000.
A medida que se suceden los ajustes en servicios públicos, impuestos y obligaciones, la VTV se suma a la lista de incrementos que deben afrontar los propietarios de vehículos en la provincia.
Este trámite obligatorio es requisito para autos particulares radicados en Tucumán con más de dos años de antigüedad o más de 60 mil kilómetros, garantizando que el vehículo cumpla con los estándares de seguridad y emisiones contaminantes permitidas.
El aumento en las tarifas de la VTV ha sido significativo en todas las categorías de vehículos. Para las motocicletas, el costo ha pasado de $4.000 a una escala que varía entre $7.000 y $12.000.
En el caso de los autos, el precio se ha duplicado de $10.000 a $20.000. Las camionetas ahora deben pagar $33.000 en comparación con los $13.000 anteriores. Los ómnibus, combis y minibuses han visto un salto de $13.000 a $30.000, mientras que los autos rurales y taxis han pasado de $9.400 a $16.000.
Por último, el control de transportes de carga ha experimentado un aumento considerable, elevándose de $16.000 a $45.000.
Procedimiento y Advertencias para la VTV
Para programar la Verificación Técnica Vehicular, los ciudadanos pueden acceder a los turnos a través de la plataforma web del organismo vinculado a la Dirección General de Transporte en Tucumán: vtv-tucuman.com.ar. Ante posibles estafas, la página enfatiza que durante el trámite no se solicitarán los datos de la tarjeta ni el pago anticipado, brindando transparencia y seguridad en el proceso.
Este aumento en los costos de la VTV ha generado preocupación y debate entre los propietarios de vehículos en Tucumán, quienes ahora deben afrontar un desembolso mayor para cumplir con esta obligación.
La impactante subida en las tarifas de la verificación técnica plantea desafíos económicos adicionales en un contexto de ajustes y cambios en el panorama de servicios y obligaciones para los ciudadanos.
