En medio del dolor y la sorpresa por la muerte de Atilio Veronelli, que partió de este plano el domingo 23 de febrero a los 65 años, salieron a la luz unas declaraciones del actor que dan cuenta de un estado de salud endeble, castigado por problemas del corazón.
Nadie se lo esperaba, pocos lo sabían, quizás los más íntimos a Veronelli. Lo cierto es que el artista hacía tiempo que padecía serios problemas de salud que no terminaba de interiorizar. Golpeado por el dolor de su hijo de 18 años en 2011, el comediante atendía a lo que los médicos le recetaban, aunque con reparos.
Hoy, con el diario del lunes, resulta impactante escuchar al artista en su última visita al piso de Implacables, realizada el 29 de septiembre de 2024, cinco meses antes de su deceso. “Estoy como puedo”, se sinceraba Veronelli con Susana Roccasalvo, sobre su estado.
“Por dentro se supone que estoy hecho pelota, pero yo no le doy bola a eso”, le explicó, en tanto que aseguró que respetaba a rajatabla las indicaciones médicas: “Yo tomo todas las pastillitas que me dieron, una detrás de la otra”.
LA REALIDAD QUE ATILIO VERONELLI NO LOGRABA ASUMIR
Sin embargo, Veronelli reconoció una dura verdad. “Hay dos cosas que yo no asumo: mi estado de salud y mi edad”, comentó, y señaló: “Yo sigo pensando que tengo unos 15 o 20 años con toda la furia. Y lo tengo que pensar cuando me preguntan ‘¿qué edad tenés?’. No me sale 64 ni en pedo…”.
Atilio aclaró que no podía hacerse la idea de su edad, y no por sentirse muy activo. La razón, dijo, era otra: “Es que mi cabeza no admite que yo pueda tener más de 50 años”. Cabe destacar que el artista que acompañó durante años a Antonio Gasalla sufría de problemas coronarios y tenía colocados varios stents tras sufrir dos infartos.
Más información en paparazzi.com.ar Fuente: paparazzi.com.ar