La China Suárez está incendiada. Llena de ira, bronca, dolor, nervios y necesidad de tomarse revancha. ¿El motivo? El de siempre, la China María Eugenia Suárez. Ahora, la actual mujer de su ex marido, Mauro Icardi, participó de la revinculación de sus hijas con el futbolista y ella puso el grito en el cielo porque no correspondía que pasara semejante cosa. Para colmo, las nenas se lo reprocharon a ella y esa fue la gota que rebalsó su vaso.
Vayamos por partes: este fin de semana debía darse el reencuentro de Mauro Icardi con las dos hijas que tiene con Wanda, Francesca e Isabella. Como a todo lo que toca, la justicia le puso un nombre largo, pomposo y difícil de pronunciar al procedimiento: revinculación, así se le dice.
De ese momento tan esperado por todas las partes no podía participar, de ninguna manera, la China Suárez. Las mismas niñas lo habían pedido expresamente. Querían estar con su papá, pero no con la mujer “que rompió la familia con mamá” según consta en las actas de la causa.
Pero algo pasó que tanto Icardi como la China sorprendieron desoyendo las recomendaciones de la justicia y ella estuvo con las nenas. Incluso, Yanina Latorre reveló que la actriz les contó a las nenas que en breve van a tener una sorpresa y Laura Ubfal afirmó que lo que viene es un bebé, un hermanito para ellas, un hijo para Icardi y la China. Además, no tuvieron empacho en mostrarse juntos jugando con ellas en torno a un super inflable.
A la noche, Icardi debía “devolver” a las nenas a Wanda. Y según contó María Belén Ludueña en Mujer Argentinas, el programa mañanera que conduce en Canal 13, las llevó en el auto no sólo con la China, sino con el peluquero de la China, un profesional de nombre Juan Manuel Cativa, y el hijo de este estilista de primera línea. Así, en “malón” podría decirse, Mauro “entregó” a las nenas en el ya famoso edificio “Chtaeau” de Avenida Libertador.
WANDA NARA RECIBIO UN FUERTE REPROCHE DE SUS HIJAS Y CAYO EN UNA CRISIS TOTAL POR CULPA DE LA CHINA SUAREZ
A las chicas las recibió “la persona que trabaja en la casa de Wanda”. No ella. Y lo que escuchó de parte de las niñas, contó la primera dama porteña, fue un fuerte reproche que la derrumbó por completo y la puso en un limbo de impotencia, bronca, enojo, furia y ganas “de romper todo”.
¿Qué fue lo que pasó para que sucediera eso? Según Ludueña “Mauro conducía, Eugenia iba en el asiento del acompañante y atrás el peluquero. Al llegar explotaron diciendo a la madre que no le gusta y que no pueden enfrentar al padre y que ella era una mentirosa conjuntamente con el Ministerio Publico Tutelar porque les habían dicho que iban a estar solos y no cumplieron con nada”. Además, Belén aseguró que “Me están diciendo que Wanda está que trina. ¡Está que trina!”. Y si, no es para menos.
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