El centro de jubilados y pensionados nacionales “Dr. Alberto Rougés”, un espacio vital para los adultos mayores de León Rougés, recibió una importante donación de equipamiento tecnológico y mobiliario por parte del Ministerio Público Fiscal. La entrega, encabezada por el propio ministro Edmundo Jiménez, busca fortalecer las tareas de atención y acompañamiento que se brindan en esta institución clave para la comunidad.
Durante un encuentro realizado en la sede del centro, ubicada en avenida Belgrano y calle San José, el ministro Jiménez hizo entrega formal de una netbook, una impresora, un escritorio, un armario y sillas. Estos elementos provienen del Equipo de Coordinación de Políticas Reparatorias (ECPR) del Ministerio Fiscal y fueron gestionados por la Oficina de Conciliación de Monteros y la Unidad Fiscal de Homicidios de Concepción.
El presidente del centro, Jesús Gerván, recibió los materiales con profunda emoción. “Hoy se nos cumple un sueño que teníamos desde el principio. Anhelábamos mucho tener estas cosas que nos sirven para el bien de los afiliados”, expresó. Gerván detalló las dificultades diarias que enfrentaban: “Teníamos una computadora que no servía, un día andaba, al otro no, y eso era un problema para las recetas y para hacer las interconsultas. La impresora, las sillas y todo lo que nos aportaron es de muchísima utilidad”. Además, destacó que el trabajo que realizan es por pura vocación: “Nosotros no cobramos un sueldo. A lo mío lo hago porque espiritualmente me siento bien dando soluciones”.
El ministro Jiménez remarcó la importancia de la colaboración. “Es importante darle una mano a esta gente que tiene tantas dificultades. Hoy les pudimos acercar elementos muy útiles para que puedan hacer no sólo las consultas virtuales, sino también imprimir lo que necesiten”, manifestó, reconociendo el valioso servicio que el centro presta a sus asociados.
El centro de jubilados de León Rougés es un pilar en esta zona rural, ofreciendo no solo actividades recreativas, sino también atención médica, enfermería, pedicuría y psicopedagogía. “Nosotros trabajamos con adultos mayores y ellos necesitan cariño y comprensión. Demasiado tienen ya con sus problemas cotidianos, que aquí nosotros tratamos de hacer sus días más fáciles”, reflexionó Rosa Tello, enfermera del lugar, resumiendo el espíritu de la institución.
