La comuna de Río Seco está trabajando arduamente para recuperar el título de Capital Provincial del Pesebre, una distinción festiva que identificaba al pueblo desde 1984. Ubicado cerca del río que lleva su nombre, a pocos kilómetros al norte de Concepción, Río Seco ha visto cómo esta tradición desapareció en la última década por diversas razones.
El exgobernador Fernando Riera fue quien, mediante un decreto, estableció oficialmente esta designación en relación con la celebración de la Navidad. Ahora, con el apoyo de los vecinos, se está trabajando incansablemente para revivir esta tradición.
A pesar de la lluvia, están construyendo alrededor de 18 pesebres a lo largo de la avenida Inmaculada Concepción y otros 30 en los diferentes barrios de la localidad. Lo interesante de estos pesebres es que están siendo elaborados con materiales totalmente reciclables, según informaron los responsables. Con cada día que pasa, el pueblo adquiere un brillo navideño que llena de entusiasmo.
Además, la plaza cuenta con un imponente árbol de Navidad hecho con maderas de tarimas y luces multicolores, lo que le añade aún más atractivo al paisaje. Todas las obras que representan el entorno del nacimiento del Niño Dios participan en un concurso promovido por la comuna, lo que estimula la creatividad de la población.
La comunidad se está uniendo para recuperar una tradición tan importante como la celebración del pesebre en Navidad. Es evidente que esta costumbre le dio identidad y renombre a este lugar, y es comprensible que todos estén emocionados por volver a ser la Capital del Pesebre.