A través de las redes sociales, la cuenta oficial del Club Atlético Ñuñorco, hizo público el hecho de inseguridad que le tocó vivir. La institución deportiva de Monteros fue víctima del robo de cables.
Relacionarían a este hecho delictivo, con los menores que desde hace tiempo atrás, vienen poniendo en vilo a los vecinos de las zonas aledañas al estadio.
Al parecer, este robo de cables fue advertido luego de que el personal del club Ñuñorco notara signos de vandalismo en el portón de la intersección de las calles Ayacucho y 9 de Julio, donde el candado estaba abierto.
Los delincuentes se habrían hecho con el cableado de las torres de iluminación con las que cuenta estadio.
Los robos de cables en Monteros se registran desde el 2021
Desde hace casi un año, los robos de cables se han vuelto comunes en la ciudad de Monteros. Principalmente sobre la zona sur y últimamente, sobre la región de El Pacará.
En octubre de 2021, un transeúnte que se desplazaba por el antiguo trazado de la Ruta Nacional 38, se encontró con un pequeño grupo de jóvenes robando cables del tendido eléctrico. Ocurrió, entre El Cristo y el puente sobre el río Pueblo Viejo.
El 13 de marzo, un joven de 19 años ingresó a robar cables en la Escuela N° 377 Benjamín Posse, del barrio del Matadero. La policía de Monteros lo interceptó con el elemento en sus manos. Eran cerca de las ocho de la mañana.
En la siesta del 23 de octubre de 2021, aproximadamente a las 15:45 horas, en la antigua traza Ruta Nacional 38 sobre el Puente del Río Pueblo Viejo, un sujeto robó aproximadamente 33 metros de cable del tendido eléctrico de Monteros. Esa vez, la policía logró reducirlo.
Durante la jornada del pasado 23 de diciembre de 2021, en el predio del ingenio Ñuñorco, el mismo ladrón de cables reducido el 23 de octubre del mismo año, volvió a ser atrapado al intentar cometer otro hecho.
Según fuentes judiciales, el hombre escaló un cerco de dos metros de altura frente al Monumento del Bicentenario, al suroeste de la Ruta 38, antes de dirigirse al área de calderas de la central azucarera.
Usó una sierra para cortar el cable del filtro de hollín con la intención de llevárselo, pero no tuvo éxito porque, para su sorpresa, el vigilante nocturno lo sorprendió robando.