Monteros se ha convertido en el epicentro de la torta imperial más deliciosa de Tucumán, gracias a la maestría de Atilio Mansilla, un panadero que ha dedicado su vida a perfeccionar esta receta ancestral.
En una emotiva entrevista con el programa “Vivo Mañana”, Mansilla reveló los secretos detrás de su creación. “Tuve el honor de aprender el oficio de la mano de un amigo”, confesó, recordando a Don Carmelo Tripolloni, quien le enseñó esta receta clásica que data de 1963.
La receta original proviene del reconocido local tucumano “El Buen Gusto”. Según Mansilla, todas las masas utilizadas en la elaboración de la torta imperial son auténticas recetas de esa época. “Habrá sido año 1963 cuando comenzamos a realizarla en Monteros”, comentó con nostalgia.
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Uno de los secretos para lograr un merengue exquisito, según Mansilla, es prepararlo durante la noche, cuando el horno está frío. “Esto tiene un proceso, hay que secarlo no cocinarlo, pero también darle mucho amor”, explicó.
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La panadería de Mansilla es una empresa familiar donde todos trabajan con pasión y dedicación. “Lo hago con mucho cariño acompañado de mis empleados, mis hijos, mi familia”, afirmó el panadero, destacando el valor de la tradición y el trabajo en equipo.