El presidente de Colombia, Gustavo Petro, anunció la firma de un decreto que establece un aumento del salario mínimo de casi un 10% para 2025, lo que representa un pago de 322 dólares mensuales, tras el fracaso de las negociaciones entre los sectores empresariales y los sindicatos. El mandatario lo describió como un “regalo de Navidad para el pueblo trabajador de Colombia”, en el marco de su segundo año de gobierno.
De esta manera, el salario mínimo en Colombia se fijó en 1.423.500 pesos colombianos mensuales para 2025, lo que significa un aumento de 123.500 pesos (aproximadamente 28 dólares) en comparación con el salario de este año, que es de 1.300.000 pesos (294 dólares).
Aguinaldo
Desde Zipaquirá, una ciudad cercana a Bogotá, el presidente destacó que su gobierno, el primero de izquierda en Colombia, ha logrado un incremento entre el 30% y el 35% en el salario mínimo en los últimos años. Entre 2022 y 2023, el aumento fue del 16%, mientras que el crecimiento interanual de este año alcanzó el 12%.
“Es un crecimiento del nivel de vida de todas las personas que ligan su ingreso al salario mínimo”, celebró Petro al anunciar la firma del decreto, en un evento donde participó en la última Novena de Aguinaldo y se reencontró con varios conocidos y compañeros en el barrio Bolívar 83, que guarda un significado personal para el mandatario.
Colombia, con una población de 50 millones de habitantes, presenta una de las tasas más altas de empleo informal en América Latina, alcanzando cerca del 50% de los empleos. Aproximadamente 10 millones de colombianos (45% de los ocupados) ganan menos de un salario mínimo al mes, mientras que el desempleo afecta al 9,5% de la población apta para el trabajo, según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE).
“El próximo año esperamos que la inflación se ubique en un 3%, lo que implica que el salario mínimo tendrá un crecimiento real del 6,54%”, añadió el presidente, destacando que esta es “la tercera vez” que su gobierno ha logrado aumentar el salario mínimo “en términos reales”.
Aún con una economía que ocupa el cuarto lugar en América Latina, aproximadamente 3,7 millones de trabajadores (16% del total) reciben el salario mínimo mensual como su único ingreso en Colombia. Sin embargo, el Banco de la República, encargado de la emisión en el país, prevé que la inflación se mantenga por debajo del 5,3% al final de este año.
“Colombia va a crecer más”
Petro también aprovechó su presentación para responder a las críticas recibidas desde el sector empresarial por el aumento, después de que el presidente de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi), Bruce Mac Master, advirtiera que el incremento acarrearía “una gran cantidad de consecuencias”.
“El salario mínimo sí hace crecer la economía, no al contrario, no es con trabajadores esclavos como la economía de un país crece”, le respondió el mandatario, antes de agregar: “La tesis suya, señor Bruce, es una soberana y profunda mentira, Colombia va a crecer más”.
Por su parte, el presidente de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco), Jaime Alberto Cabal, calificó el aumento como un intento de ganar el favor de los trabajadores. “Es un decreto populista del presidente Petro para congraciarse con los trabajadores y los sindicatos del país. No tiene ningún sustento económico, ni social, ni técnico”, dijo el funcionario a Blu Radio.
Para justificar el aumento, Petro resaltó que, al cierre del año, se espera que la inflación en Colombia sea del 5%, con la inflación de alimentos situándose en un 2,7%, lo que representa “la caída más grande dentro de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE)”, según expuso en el evento.
Navidad para todos
En la víspera de Navidad, Petro y su gabinete compartieron un almuerzo con personas en situación de calle en Bogotá, donde el funcionario recordó que “todo ser humano es importante y vital para la existencia”. En su opinión, ser habitante de la calle “no es una decisión libre de la persona, sino que es el producto de una sociedad que no da oportunidad”.
El presidente hizo un llamado a fortalecer los programas de restitución de derechos para este grupo, resaltando que “ser habitante de la calle no te quita los derechos ciudadanos que tienes por nacer en Colombia”.
Petro pidió al Ministerio de Igualdad, liderado por su vicepresidenta, Francia Márquez, que impulse una “avalancha de servicios” para los habitantes de la calle en las principales ciudades afectadas por el fenómeno y se fortalezcan los programas existentes en la capital.
“La esperanza crece en el fango. No es un estado pasivo; no es esperar un milagro. La esperanza es actuar inmediatamente para transformar las cosas”, concluyó el presidente colombiano.
Fuente: pagina12.com.ar