Las autoridades israelíes liberaron a 90 presos palestinos a cambio de la liberación de las tres rehenes israelíes del domingo, en el segundo día de un frágil acuerdo de alto el fuego con Hamas en la Franja de Gaza que no está exento de violencia. El Ejército israelí confirmó este lunes que abrió fuego contra “sujetos sospechosos” en Rafah, en el sur de Gaza, mientras que la agencia palestina de noticias Wafa denuncia que dos personas murieron en el ataque. La Defensa Civil Palestina informó que se encontraron 137 cadáveres en esa ciudad fronteriza con Egipto desde el inicio del alto el fuego.
Más de 900 camiones entraron el lunes con ayuda humanitaria en el enclave palestino. Además del “alto el fuego total”, que empezó con un retraso de casi tres horas debido a la demora en la entrega de la lista de rehenes israelíes por parte de Hamas, la primera etapa incluye la retirada de las fuerzas israelíes de las zonas densamente pobladas de Gaza y un aumento de la ayuda humanitaria que entra al enclave.
La próxima liberación de rehenes a cambio de prisioneros, que el acuerdo determinó de periodicidad semanal, está prevista para el sábado, según informaron fuentes de Hamas. También forman parte de la primera fase las negociaciones para la modalidades de la segunda etapa, que incluye la liberación del resto de los rehenes. Una tercera y última etapa estará dedicada a la reconstrucción de Gaza y la devolución de los cuerpos de los rehenes fallecidos en cautiverio.
“Salí del infierno y ahora estoy en el cielo”
En la madrugada del lunes, después de más de ocho horas de demora, el primer grupo de presos palestinos, la mayoría mujeres y niños, fueron liberados de la prisión de Ofer, al norte de Jerusalén. El Servicio de Prisiones de Israel se encargó de reunir a todos los reclusos, cuyas identidades y estados fueron verificadas por el ejército israelí y representantes de la Cruz Roja. Varios colectivos salieron del complejo penitenciario militar, localizado en Cisjordania, hacia la ciudad de Beitunia, a tres kilómetros de Ramalá, capital administrativa del territorio palestino, donde los prisioneros se encontraron con sus familias y allegados.
En este primer contingente, formado por 69 mujeres y 21 niños, se encuentran figuras célebres como Jalida Jarrar, la activista feminista y diputada por el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) de 62 años, condenada a dos años de prision tras un acuerdo de culpabilidad en el que se declaró culpable de pertenecer a una organización considerada como terrorista por Israel.
También fueron excarceladas Abla Abdelrasoul, la esposa del dirigente de la FPLP, y Dalal Jaseeb, hermana del político del grupo islamista Saleh Arouri. Según la cadena qatarí Al Jazeera, solo ocho de los 90 liberados fueron arrestados antes del ataque de octubre de 2023. “Salí del infierno y ahora estoy en el cielo. Todos estamos fuera del infierno. Solían violarnos, golpearnos, dispararnos gas lacrimógeno”, dijo Abdelaziz Atawneh, un niño liberado de una prisión israelí este lunes, a los medios locales.
“Más feliz que nunca”
Luego de 471 días de cautiverio, las tres rehenes israelíes pudieron reunirse con su familia al llegar al hospital Sheba, cerca de Tel Aviv, donde arribaron en “condición estable”, según constataron fuentes médicas. Una de ellas, Emily Damari, la británica-israelí de 28 años, dijo en un mensaje en redes sociales que está “más feliz que nunca”. “Volví a mi vida, a mis seres queridos, soy más feliz que nunca. Doy las gracias a mi familia y a mis mejores amigos”, escribió la joven en su cuenta de Instagram.
Su familia confirmó poco después que la joven perdió dos dedos de su mano izquierda a raíz de un disparo en los ataques del 7 de octubre de 2023. Este lunes Hamas destacó el buen estado de salud en el que se encontraban los rehenes liberados, frente al “agotamiento y abandono” visible en los 90 presos palestinos liberados por Israel. Según escribió el grupo islamista en un comunicado, este contraste “encarna la gran diferencia entre los valores y la ética de la resistencia y el barbarismo y fascismo de la ocupación”.
El proceso de liberación de rehenes y detenidos, puesto en manos del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), fue definido como una operación compleja que requirió rigurosas medidas de seguridad. “Atravesar grandes grupos de personas entre emociones a flor de piel supuso un desafío durante los traslados y, en Gaza, los equipos del CICR tuvieron que hacer frente a los peligros de artefactos explosivos no activados e infraestructura destruida”, manifestó el organismo a través de un comunicado.
Violencia sin tregua
La liberación de los presos palestinos en Cisjordania y Jerusalén Este provocó una ola de violencia en el terreno en la madrugada del lunes, con extremistas israelíes prendiendo fuego casas y tirando piedras a los vehículos de civiles palestinos. La ONG israelí Yesh Din, opuesta a la ocupación de Cisjordania, dio el anuncio de ataques en las localidades de Sinyil, Ein Siniya, Turmusaya y Luban al Shariqiya. “¿Cese al fuego? No en Cisjordania”, escribió el grupo en un mensaje en X, al que adjuntó dos videos en los que se ven vehículos y propiedades ardiendo.
El Jefe del Estado Mayor del Ejército israelí, el teniente general Herzi Halevi, pidió a sus tropas que estén listas “para llevar a cabo importantes operaciones antiterroristas” en los próximos días en Cisjordania. A pesar del avance de la primera fase de la paz, el acuerdo aún está lejos de ser firme. En un escueto mensaje, las fuerzas armadas israelíes dijeron haber identificado “a varios sujetos sospechosos que suponían una amenaza contra los soldados que operaban en varias zonas de Rafah de acuerdo con los términos del acuerdo de alto el fuego”, por lo que “los soldados respondieron con fuego contra ellos”.
El Ejército de Israel, consultado por la muerte de los dos palestinos en Rafah, se limitó a decir que, cuando las tropas abrieron fuego “se identificaron impactos”. Por su parte los medios palestinos denunciaron que dos personas habían muerto en Rafah por disparos de los francotiradores israelíes, entre los que se encontraba un niño. Horas antes Wafa había informado que otros ocho palestinos, entre ellos varios niños, resultaron heridos en dos diferentes incidentes: uno tras el bombardeo de un dron, y otro tras la explosión de un “objeto sospechoso dejado” por las tropas israelíes en la ciudad fronteriza con Egipto.
El primer ministro Benjamin Netanyahu indicó que Israel se reserva el derecho de retomar las hostilidades si la tregua es violada, y prometió trabajar para que Gaza nunca vuelva a representar una amenaza para Israel. El ministerio de Salud del enclave reportó este lunes que los ataques israelíes dejaron 47.035 muertos hasta el inicio de la tregua, y la Defensa Civil Palestina pide ayuda internacional para hacer frente a la crisis humanitaria en la región.
LLega más ayuda humanitaria
Un portavoz de la secretaría general de la ONU informó que 915 camiones cruzaron las fronteras de Gaza este lunes tras “compromisos con las autoridades israelíes y los garantes del acuerdo de alto el fuego”. Estos 915 camiones se suman a los 630 que entraron el domingo en la Franja, en cumplimiento de uno de los puntos del acuerdo que entró en vigor y que estipulaba que se permitiría la entrada en el territorio palestino de 600 camiones, 50 de ellos cargados con combustible.
El grueso de la ayuda lo constituyen alimentos no perecederos como arroz, legumbres, pasta y aceite, además de bidones con agua, mantas y material sanitario, según detallaron medios egipcios. La entrada de ayuda humanitaria ha sido catalogada como la máxima prioridad en estos primeros días de tregua, dado el inmenso grado de devastación en Gaza y la escasez de todo tipo de alimentos y productos en general.
Fuente: pagina12.com.ar