Desde el Ministerio de Desarrollo Productivo de Tucumán informaron, a través de su referente, Álvaro Simón Padrós, que la producción de azúcar en la provincia se inició con la molienda de 12 fábricas, y la próxima semana se sumarán otras dos: Santa Bárbara y Ñuñorco de la ciudad de Monteros. La zafra 2021 comenzó el 8 de mayo con el ingenio La Florida.
El informe de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres fue presentado la semana pasada. El mismo muestra, que 276,400 hectáreas de caña de azúcar se utilizaran para la molienda. Lo significa un 0,17% menos que la actividad anterior y enumera:
- Se estima que hay 15 millones de toneladas de caña de azúcar, una reducción de 800.000 toneladas de semilla de caña de azúcar. Si no hay heladas, se estima que serán 14,2 millones.
- El área cosechada este año se ha reducido en 480 hectáreas, divididas en grandes productores y pequeños productores.
- En la cosecha de 2020, las fábricas molieron 1.100 millones de toneladas de caña de azúcar, lo que dio como resultado 78.000 toneladas de azúcar, a una producción del 7% de rendimiento.
- Si hay una helada leve, se estima en 13,9 millones de toneladas, y si la helada es severa, unos 13,5 millones de toneladas.
En referencia a ello, afirma: “todos ya saben que Tucumán es la provincia más diminuta de la República Argentina. Este tipo restricción geográfica, sin duda, ha hecho de la comunidad empresarial tucumana un polo de desarrollo industrial. Por ende, la industria azucarera está preponderante en la economía de la provincia”.
También cree que la provincia hoy es un sector que produce azúcar, biocombustibles y energía a través de la conversión de la caña de azúcar. El complejo debe estar orientado a los alcoholes de azúcar, se puede elaborar bioinsumos a partir de etanol y azúcar para otros sectores de la economía nacional
Situación del ingenio San Juan en Tucumán
No cree que el Ingenio San Juan muela este año. Está en proceso judicial, por eso es difícil empezar a cosechar”, explicó en una entrevista en Los Primeros.
A su vez, calcula que la caña de azúcar cultivada en la fábrica podría ser cosechada y triturada por otras fábricas y los fondos podrían usarse para pagar la deuda de la fábrica con los trabajadores.