Un allanamiento realizado en el marco de una causa por violencia de género ha develado una trama de presunta corrupción y desvío de alimentos destinados a programas sociales.
Un hallazgo inesperado
Durante el procedimiento, llevado a cabo en el domicilio del principal sospechoso de un caso de violencia de género, la Policía se encontró con una gran cantidad de mercadería oculta, entre la que se encontraban alimentos que, según las primeras investigaciones, pertenecerían al Ministerio de Desarrollo Social.
“Al irrumpir en el domicilio, nos sorprendimos por la cantidad de mercadería que se encontraba allí. Todo estaba tapado, por lo que no se veía desde afuera. Fue un hallazgo inesperado”, expresó el comisario Martín Ávila, jefe de la Comisaría 15.
Evidencias de una posible venta ilegal
Además de los alimentos, se hallaron anotaciones y registros que indicarían que estos productos estaban siendo entregados a negocios locales. “Hemos procedido al secuestro de toda la documentación encontrada, lo que incluye cuadernos con anotaciones de entregas a distintos comercios. Esto nos lleva a investigar más a fondo su origen”, señaló Ávila.
Investigación en curso
El caso ha generado una gran conmoción y ha sido puesto en conocimiento del gobernador Osvaldo Jaldo, quien ha instruido a las autoridades a investigar a fondo este hecho. “El mensaje del Gobernador es claro: si alguien ha cometido un delito, debe responder por ello”, afirmó el comisario Ávila.
El detenido permanece a disposición de la Fiscalía de Violencia de Género, mientras que la mercadería secuestrada será sometida a peritajes para determinar su origen y destino final. “Estamos a la espera de las indicaciones de la Fiscalía para determinar el destino final de esta mercadería”, concluyó el Jefe de la Comisaría 15.