Con el triunfo Yamandú Orsi ya claro este domingo a la noche, el gobierno de Javier Milei felicitó al nuevo presidente de Uruguay, Yamandú Orsi.
“Ratificamos nuestro compromiso de trabajar junto a Uruguay para fortalecer la agenda compartida y el bienestar de ambos países”, dijo la cancillería argentina en un comunicado.
Las relaciones bilaterales entre el libertario y el frenteamplista caen igual ahora en una inmensa incertidumbre por la fuerte ideologización de su mandato, rechazando relacionarse con los gobiernos de izquierda.
Aún que fue Orsi quien tendió la mano durante un acto de campaña en Argentina al señalar sobre una futura convivencia regional con Milei: “Tiene que ser una relación fluida. Son distintos signos políticos, orientaciones diferentes. Eso siempre va a pasar. Para Uruguay, una relación fluida con Argentina y Brasil es más que necesaria”. Este domingo, el canciller Gerardo Werthein, fuertemente criticado por su faltazo junto a Milei a los históricos actos por los 40 años del Trarado de Paz con Chile, dijo que Argentina y Uruguay eran “Países hermanos” y que se iba a trabajar con quien ganara los comicios.
La República Argentina felicita al pueblo uruguayo por su ejemplar jornada cívica y saluda al presidente electo Yamandú Orsi por su victoria.
Ratificamos nuestro compromiso de trabajar junto a Uruguay para fortalecer la agenda compartida y el bienestar de ambos países.
— Cancillería Argentina 🇦🇷 (@Cancilleria_Ar) November 25, 2024 Pero si bien Milei y su gobierno se mantuvieron distantes, indiferentes de las elecciones uruguayas, las relaciones bilaterales son buenas. Milei y Werthein no van al Vaticano, pero estarán en Montevideo el 5 de diciembre para participar de la cumbre del Mercosur que se hace allí. Un mes después irán a Davos, Suiza a Foro Económico Mundial.
En el Gobierno sugieren que no hay que exigirle a Milei un llamado con Orsi.
Su vínculo preelectoral internacional más estrecho fue con Donald Trump. Buscó desesperadamente un llamado com él y logró la cita que tuvieron en Mar-a-lago tras el triunfo del republicano.
Hay que reconocer que si bien Milei ignoró las invitaciones del saliente presidente Luis Lacalle a reunirse en la estancia de Anchorena desde hace un año, lejos de impedir como con otros países el vínculo, lo habilitó. Pusieron como embajador ante Uruguay a un diplomático con experiencia, Martín García Moritán contraparte del habilidoso político Carlos “el pájaro” Enciso, embajador de Lacalle Pou en Argentina.
Pero el salto en la mejora del vínculo la dieron Milei y su ex canciller Diana Mondino y cuando dieron luz verde a un viejo pedido de los uruguayos de llevar a 14 metros el dragado del canal que va al puerto de Montevideo.
Durante años, el Kirchnerismo se los negó en medio de numerosos otros conflictos. Lacalle Pou y Milei superaron momentos difíciles. Hubo momentos muy difíciles. El uruguayo destacó que en su país y en su versión del liberalismo el Estado tiene un rol importante, lo que no gustó al paladar libertario.
Después, en la cumbre del Mercosur, en, julio pasado, en Asunción, fue Lacalle Pou el mensajero contra la ausencia de Milei, que prefirió asistir a un show de conservadores organizado por los Bolsonaro en Camboriú Brasil. Aún así, LLP fue recibido por Milei en la Rosada y hablaron de comercio e inversiones.
Con un comercio bilateral de entre 1.500 y 2.000 millones de dólares con un superávit para la Argentina de 700 millones las relaciones comerciales son buenas con altas y bajas. Los libertarios también resolvieron las deudas que Argentina tenía por las trabas a los importadores, y los exportadores orientales pudieron cobrar.
Fuente: clarin.com