El presidente de la Corte Suprema, Horacio Rosatti, ha expresado su preocupación por las medidas anunciadas por el presidente Javier Milei, señalando que podrían considerarse como una situación de emergencia según el derecho constitucional.
Según Rosatti, la facultad principal de la Corte Suprema es el control de constitucionalidad, por lo que los jueces deben ser prudentes y sabios al determinar qué pueden controlar y qué no en situaciones de excepción.
En la entrevista con LN+, también se tocaron temas como los aumentos de tarifas y el protocolo de Patricia Bullrich para intervenir en la protesta social, así como la importancia de evitar que el Poder Judicial ejerza funciones gubernamentales.
Además, Horacio Rosatti mencionó que los magistrados no pueden intervenir en el ámbito de las decisiones políticas, ya que su papel se centra en controlar los procedimientos y los efectos o contenidos de las decisiones. Asimismo, recordó que la Reforma de 1994 estableció que la Corte tendría jurisdicción sobre decretos de necesidad y urgencia y legislación delegada, lo cual se relaciona con el súper DNU anunciado por Milei.
Rosatti destacó la existencia de la Comisión Bicameral de Tratamiento Legislativo en el Congreso, encargada de revisar la pertinencia de los decretos mencionados. En relación a esto, mencionó el caso de un amparo presentado contra los aumentos en las tarifas de gas durante el gobierno de Mauricio Macri, en el cual se controló el procedimiento y se obtuvo un fallo favorable.
En cuanto al debate sobre el derecho a manifestarse y el derecho a circular, en relación al protocolo antipiquetes anunciado por la ministra Patricia Bullrich, señaló la importancia de optimizar ambos derechos en lugar de confrontarlos.
Por último, el presidente de la corte opinó sobre el papel de la Corte como contrapeso de los otros poderes del Estado y como armonizador jurídico del Poder Ejecutivo. Manifestó la importancia de encontrar un equilibrio y evitar tanto la resistencia al cambio como el seguimiento ciego del Gobierno.