El caso de este delincuente es una muestra clara del fenómeno de los “ladrones turistas”. Todo comenzó el 9 de enero, cuando un hombre oriundo de Flores fue detenido junto a un cómplice salteño y una mujer tucumana por intentar pagar en un bar con tarjetas robadas.
Los investigadores vincularon este caso con otros delitos cometidos con inhibidores de alarmas y lograron identificar al sospechoso. A través de seguimientos, lo ubicaron en una joyería de la calle Belgrano al 2100, donde días atrás había gastado $620.000 con una de las tarjetas robadas. El dueño del comercio lo reconoció y la policía procedió a detenerlo en el lugar.
El acusado, identificado como Rubén Oscar Robledo, fue trasladado nuevamente a la Unidad Penal N° 44 de Batán. En su poder tenía un inhibidor de alarmas, que fue secuestrado como prueba. No obstante, poco después volvió a recuperar la libertad. Durante la investigación, se allanaron dos domicilios donde se encontraron más elementos clave, como una base cargadora de inhibidores y una llave copiadora de señal. Las autoridades buscan determinar el alcance del accionar del detenido y su posible conexión con otros hechos similares.
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