“Qué sufrimiento para los chicos y su madre, Dios mío”, “Pocos médicos con sueldos mediocres”, “Acá las víctimas son los niños, adultos, ancianos y los médicos a quienes les pagan miseria”, “Una pena ver tantos niños enfermos”, “Yo fui a las 13 y había mucha gente”.
El video registrado en la guardia del Hospital de Niños dura 20 segundos, pero es una escena que se repite en los hospitales públicos y privados de Tucumán. La situación epidemiológica cada día es más compleja y los testimonios de las madres llegan desde todas partes: “Aquí en Banda del Río Salí estuve desde las 12 del mediodía hasta las 22 esperando para ser atendida en el Hospital del Este con 40 de fiebre y muchos dolor cuerpo”.
A las quejas generalizadas por el sistema de guardias y la escasez de personal médico, los tucumanos y tucumanas coinciden en algo: “Estuve con mi bebé internada en el Hospital de Niños y es impresionante el laburo que hacen los médicos, de eso no hay que quejarse. Solamente que no dan abasto porque hay 2 ó 3 médicos y tienen que atender a los niños que están internados y los pacientes que van llegando”.
“Agradezco y agradeceré siempre al hospital de niños por las veces que necesité ir con mis hijos. Viví el compromiso, la vocación y a pesar de las falencias en personal dan hasta donde pueden”, “No es culpa de los médicos. Esta situación es culpa del Estado que le vuelve a dar la espalda a la salud de sus ciudadanos y a los médicos que hacen esfuerzo incomparable para atender a todos”.
“Las veces que fui y esperé siempre ayudaron a mi pequeña con la mejor predisposición a pesar del cansancio”, “El video preocupa, por un momento hay que dejar de lado las campañas y concentrarse en lo realmente importante: la salud de todos los tucumanos en este nuevo brote de dengue”, fueron los testimonios. Las imágenes lo dicen todo.
Ante este escenario, la doctora Inés Gramajo, directora del Hospital de Niños, indicó: “No vi el video, pero yo atendí a la mamá que lo filmó. No importa el video. La guardia trabaja con un trilash: las enfermeras dividen la atención en código verde, amarillo y rojo, este último para pacientes urgentes. Las consultas crecieron: 680 pacientes en 24 horas y ayer fueron 520 en guardia y 180 en consultorio”.
“Hay una demanda no solo en los hospitales sino en los privados. Ante el primer síntoma, está bueno que la mamá venga. Pero tiene que tener paciencia. Ningún paciente se va a ir sin atención. Dotamos las guardias, pero las demandas se incrementan por dengue, dolores, cefaleas. Y con respecto a la atención en los CAPS también están atendiendo la gran demanda“.