Una cifra histórica y alarmante. Con el secuestro de 87 kilos de cocaína este lunes en la ruta 40, Tucumán superó la tonelada de droga incautada en lo que va de 2025, un récord sin precedentes que expone el crecimiento exponencial del narcotráfico en la región. El total de 1.024 kilos decomisados hasta la fecha es cinco veces superior a lo registrado en el mismo período de 2024.
El dato desnuda una realidad preocupante: mientras los controles se refuerzan en Salta, el narcotráfico parece haber desviado sus rutas hacia nuestra provincia y otras vecinas. Las estadísticas son contundentes: mientras en Salta el aumento de secuestros fue menor al 10%, en Tucumán se disparó un 500% y en Catamarca, que casi no figuraba en el mapa narco, pasó de 4 a 476 kilos en un año. “Evidentemente están fallando los controles en la frontera con Bolivia, principal puerta de ingreso de la droga”, reconoció Jorge Dib, secretario de Lucha contra el Narcotráfico.
Ante este escenario, el jefe de Policía, Joaquín Girvau, aseguró que Tucumán reforzó por cuenta propia el “Operativo Lapacho” para blindar sus fronteras ante la falta de coordinación regional. “Lamentablemente no tuvimos eco de las demás provincias y hoy vemos las consecuencias”, señaló. La “Ruta de los Valles”, que combina las trazas 40, 307 y 38, se ha convertido en el corredor más caliente, concentrando más de la mitad de la droga incautada este año, con un total de 575 kilos.
Aunque la cifra total asusta, las investigaciones sugieren que menos del 40% de la droga (unos 360 kilos) tendría como destino final el mercado tucumano. El resto sigue viaje principalmente hacia Buenos Aires. “Estamos trabajando para que no quede ni un gramo”, advirtió Dib. En paralelo, la Justicia Federal y ordinaria profundizan las investigaciones sobre el patrimonio de los principales sospechosos, como Javier “Chuky” Casanova o Walter “Petiso David” Lobo. “Iremos hasta el fondo con estos personajes”, sentenció Girvau, subrayando que se debe investigar el origen de sus bienes y sus lujosos estilos de vida sin tener empleos formales conocidos.