¿POR QUE SE LLAMA MONTEROS?| El nombre de Monteros, al igual que muchas localidades históricas, posee varias versiones que a lo largo del tiempo han contribuido a tejer la intrincada trama del origen de la ciudad.
A pesar de no contar con una única respuesta definitiva, dos de las explicaciones más aceptadas y compartidas por la comunidad se destacan en la narrativa de su historia.
Una de las versiones se adentra en los recovecos de la memoria histórica para afirmar que Monteros surge como un término derivado de las circunstancias que rodearon la fundación de la ciudad.
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Se cuenta que algunos pobladores del antiguo San Miguel, ubicado en un paraje actualmente conocido, decidieron no trasladarse a la nueva ubicación propuesta. Estos individuos se opusieron a la mudanza y se rebelaron, refugiándose en los montes cercanos.
Desde entonces, la población los identificó como “monteros”, es decir, aquellos que viven o habitan en los montes. Así, el nombre de la ciudad habría nacido de esta peculiar situación, en una fusión de resistencia y geografía.
La segunda versión echa raíces en la relación con el antiguo San Miguel de Tucumán y señala que los habitantes de esa localidad fundaron Monteros el 4 de octubre de 1865 bajo el nombre de “ciudad del Santísimo Rosario de los Monteros”.
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Esta variante sugiere que Monteros habría sido una extensión o desprendimiento del San Miguel original, con una identidad propia que incluía la referencia a los “monteros”, quizás en alusión a la geografía circundante o a una característica particular de la comunidad.
Es interesante notar cómo la historia y la tradición han tejido estas versiones, dotándolas de un aire de misterio y encanto que nutre la identidad de la ciudad.
Aunque no existe una respuesta definitiva, estas narrativas contribuyen a forjar un sentido de pertenencia y orgullo entre los habitantes de Monteros, recordándonos que la historia a menudo es un mosaico de interpretaciones que enriquecen el pasado y el presente de una comunidad.