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Virgen del Valle: “Inició la festividad mariana en Catamarca”

En el Paseo de la Fe tuvo lugar la ceremonia de la baja de la Virgen, así como la toma de posesión del Padre encargado de la Gruta

La tradicional bajada de la imagen de la Virgen del Valle desde Camarín hasta el Paseo de la Fe tuvo lugar en la jornada del pasado viernes 29, dando inicio a los festejos por la Purísima y Limpia Concepción del Valle, que culminarán el 8 de diciembre del próximo año.

El tema de la novena “El Año Jubilar, tiempo de gracia y conversión” y el lema ““Peregrinos de esperanza”” significa el espíritu de la época, propuesto por el Papa Francisco, para continuar juntos como discípulos misioneros en la salida.

La ceremonia estuvo presidida por el obispo diocesano Luis Urbanc, quien la tomó en sus brazos, acompañado del Rector de la Catedral Basílica y Santuario Mariano, Padre Gustavo Flores y sacerdotes del clero de Katamarkan. Durante el evento, sucedieron gestos de amor, fe y profunda devoción a la Virgen del Valle.

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Mientras sonaban las campanas y comenzaba el traslado al Paseo de la Fe, fieles devotos la esperaban agitando pañuelos, vítores y cánticos, manifestando su cariño por su encuentro con la Virgen.

Historia de la Virgen del Valle

La imagen de Nuestra Señora del Valle fue encontrada entre 1618 y 1620 en una cueva en Choya, provincia de Catamarca. Se dice que se trata de un aborigen sirviendo a Don Manuel Salazar, quien de pronto se sorprendió al escuchar varias voces y pasos una tarde, un grupo de muchachas con flores y luces subían sigilosamente a la montaña. A pesar de la sorpresa, el observador prefirió regresar a su rancho, pero la curiosidad pudo más que él.

A la mañana siguiente, de regreso a ese lugar, decidió seguir las huellas dejadas por las mujeres. Después de caminar unos kilómetros, vio un pequeño nicho de piedra rodeado de restos de una estufa y cubierto de flores y plantas. Siguió caminando hasta que vio un retrato de la Virgen María, con su rostro moreno y las manos juntas en oración.

Este descubrimiento se mantuvo en secreto, aunque con el tiempo el propio aborigen aprendió a amar y reverenciar a esta figura tan parecida a él. Por lo tanto, decidió contarle el secreto a su amo.

En enero de 1890, Fray Orellana mandó hacer la Corona de la Virgen y fue en esta época cuando se hicieron las primeras imágenes de la Virgen del Valle.

En 1941 la Coronación de María celebró su 50 aniversario. Para celebrarlo, el obispo de Catamarca encargó a Orlando Orlandi que pintara los elaborados lienzos de la historia de la Virgen María. Y ese mismo año, la catedral fue declarada Monumento Histórico Nacional.

El 20 de marzo de 1974, bajo el tercer mandato del presidente de Juan Domingo Perón, la Virgen Morena, atípica para su época, recibió el título de honor de “persona del patrocinio del turismo nacional”.

El Milagro de la Virgen del Valle

En más de 400 años de reverencia, los devotos han otorgado a Nuestra Señora del Valle el cumplimiento de innumerables eventos milagrosos: curas de enfermedades terminales como la ceguera y la parálisis.

También se le atribuye mucho haber salvado al pueblo de una plaga de gusanos y langostas, además, cuenta la leyenda popular que a lo largo de la historia logró realizar una serie de resurrecciones que le permitieron cimentar su popularidad entre sus seguidores. Gran encanto generado.

Uno de los milagros más celebrados y contados por los fieles es el de un campesino cordobés que, tras enfermar, pidió protección a la Virgen y prometió que iría a su santuario.

Se curó en segundos, y el granjero se levantó para cumplir su promesa. A esa hora, en la catedral de Catamarca, se lamentaba la repentina desaparición de un antiguo y preciado cántaro de plata.

Unos días después, el granjero llegó a la iglesia con una jarra en la mano. Comentó que había salido de casa para cumplir una promesa, y que él y su mula habían tenido mucha sed durante el viaje.

Se encomienda de nuevo a la Virgen y encuentra un cántaro del que pueden beber tanto él como los animales. El cura encargado de la catedral reconoció la jarra de plata perdida en la sacristía.

La Virgen de de Nuestra Señora del Valle de Catamarca es venerada por miles de devotos que se maravillan con sus milagros y apariciones. No solo es la patrona de toda la región del noroeste argentino, sino del turismo nacional.

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