El la jornada de ayer se realizó un desfile militar con motivo de conmemorarse 44 años del fallecimiento del Teniente Primero Héctor Cáceres quien perdió la vida en el combate del Río Pueblo Viejo. Hecho que tuvo lugar en el contexto de la Operación Independencia.
El homenaje contó con la presencia de Diego Cáceres (hijo de nuestro héroe) y del Teniente Coronel Rodolfo Richter, a quien Cáceres le salvó la vida entregando la suya.
Testimonio de su Heroísmo
Serían las 17 horas, del 14 de febrero de 1975, cuando la senda por donde marchábamos se bifurcó y el cabo 1º Orellana, el hombre punta, tomó por una de ellas. Yo tomé por otra y de repente me encontré con un guerrillero parado a unos 20 metros delante. La sorpresa fue mutua, pude verla en su rostro. Abrí el fuego y, como él corrió entre unos matorrales, lo seguí sin dejar de disparar. Debí sobrepasar a alguien que me disparó. Sentí un golpe en la espalda y caí. Hubo unos segundos de silencio absoluto. Creo que fue la sorpresa de ambos bandos que además no tenían una idea clara de lo que sucedía adelante. Pero inmediatamente se generalizaron los disparos. Orellana también había sido herido. Una bala le hizo un surco en la espalda sin penetrarla. Pudo sobreponerse y a pesar de no poder mover un brazo, abatió a un guerrillero que se disponía a avanzar sobre él, seguramente para rematarlo. Le grité a Cáceres que estaba herido. Instintivamente me dirigí a él porque había sido mi instructor en el curso de “comandos” y ambos íbamos agregados al Equipo de Combate. Creí que me rescatarían cuando progresara el avance pero Cáceres se lanzó a la carrera hasta donde yo estaba. Me sorprendí. A pesar del egoísmo que puede tener todo herido al desear una atención inmediata, me dí cuenta que estaba arriesgando demasiado al abandonar una posición cubierta. Se tiró cuerpo tierra al lado mío. ¡¿Qué hace?! le dije. ¡Quedate tranquilo que ya te saco!, contestó. En es instante nos abrieron fuego. Emitió un quejido y quedó inmóvil. Luego supe que la bala le entró por el hombro, se desvió en el omóplato y perforó su corazón.
El combate de “Río Pueblo Viejo” tuvo un auténtico héroe: el Teniente 1º Cáceres. La Nación Argentina podría haberlo mostrado como ejemplo para la ciudadanía en general y para la juventud en particular, pero no lo ha hecho. Es cierto que no es el único héroe del pasado y del presente, pero tampoco abundan como para ignorar su existencia. El acto heróico de Cáceres no solo no ha sido mostrado, sino que también ha quedado confundido con otros actos que no superan lo meramente meritorio o peor aún, reemplazado por conductas deleznables de una nueva y dudosa moral. La entrega de la vida por el otro, no es un hecho usual. Es un hecho extraordinario que no puede concluir con la entrega de una medalla a los deudos. Merece otra consideración que debe extenderse en el tiempo y que sirve a la formación de las futuras generaciones de una nación. Así lo han entendido todos los Estados que han querido progresar en el mundo, y lo han ignorado los que han comenzado a transitar el camino de la decadencia. (Texto extraído del sitio www.capitancaceres.com)
Buenos Aires, 02 de Mayo 2012
Tcnl (R) Rodolfo Richter
Diego Cáceres reconoce a su padre como un auténtico Héroe. Así lo enunció en su discurso del 14 de febrero de 2018, cuando se conmemoró el 43° aniversario del fallecimiento del Capitán Héctor Cáceres.
El Discurso
Al conmemorarse hoy el 43° Aniversario de la Muerte de mi Padre, el Capitán de Infantería Don Héctor Cáceres, quiero hablar de sus últimos instantes antes de entregar su vida para salvar un camarada, y luego como hijo de un héroe.
Siempre me pregunté qué distingue un acto heroico de cualquier otro tipo de acto. Es decir, ¿qué características debería tener, la persona o la situación para que sea considerado Héroe? Para ello, me voy a centrar en las definiciones de los máximos exponentes de la Psicología Mundial, donde dicen que:
“Para que un acto se considere ‘heroico’ debe cumplir cuatro criterios básicos:
- Se debe hacer voluntariamente.
- Debe suponer algún riesgo o sacrificio potencial, como amenaza de muerte, amenaza inmediata para la integridad física, amenaza a largo plazo para la salud, o degradación grave de la calidad de vida.
- Se debe realizar al servicio de una o más personas o de la comunidad en general.
- No se debe haber previsto de antemano ningún beneficio.”
Volviendo entonces al Combate Río Pueblo Viejo: Al escuchar el ruido de las balas al frente y unos instantes más tarde, sentir el grito de auxilio del Tte Ritcher exclamando “¡Cáceres estoy herido!”, mi padre decide de forma voluntaria, ir en auxilio de su subalterno herido. Si bien sabía del riesgo que corría por cuanto escuchaba el ruido del fuego cruzado, fue el hecho de proteger a su camarada lo que lo impulsó a correr en su ayuda. Finalmente, al llegar a su lado, luego de su corrida, el único fin que buscaba era auxiliar a su subalterno, por cuanto sus últimas palabras fueron “Quedate tranquilo que ya te saco”. Segundos después muere por un impacto en el corazón.
Es por ello entonces, que el último acto en vida de mi padre, no es un acto común, sino que es el Acto de un Verdadero Héroe.
Además quiero agregar que en la actualidad Debemos celebrar los actos heroicos, y a las personas que los realizan, porque el heroísmo hace que nos centremos en los aspectos positivos de la naturaleza humana. Los relatos de nuestros héroes son importantes porque nos recuerdan que somos capaces de resistirnos a la maldad, a no ceder a las tentaciones, de superar la mediocridad y de responder cuando los demás no actúan.
En lo personal, soy el hijo del Capitán Héctor Cáceres. Soy el hijo de ese Héroe. Hijo que no pudo conocerlo. Hijo que no pudo transitar con él los momentos más importantes de nuestras vidas. Hijo que conoció a su padre solamente a través del relato de terceros. Hijo que hoy siente orgullo de estar en esta tierra, con todos ustedes, que son los miembros del Pueblo que lleva el nombre de este Verdadero Héroe.
Por eso, y de la misma manera en que mi padre luchó contra la Maldad Terrorista que azotaba este país para que pudiésemos vivir en un país Republicano, defendiendo la Patria y sus Instituciones, mi lucha continúa, donde él la dejó. Lucha que sigue contra esos mismos Enemigos que han querido BORRAR de las Hojas de la Historia la Memoria de mi Padre. ¡No los voy a dejar y no se los voy a Permitir! Lucharé con la misma pasión y coraje conque luchó mi padre para que NUNCA MÁS VUELVAN a cambiar el curso de nuestra Historia, nuestra República y Nuestras Instituciones!
¡Muchas Gracias!
(Texto extraído del sitio www.capitancaceres.com)
Pueblo de Capitán Cáceres
Capitán Héctor Cáceres es una localidad Argentina ubicada en el Departamento Monteros de la Provincia de Tucumán. Se sobre la ruta provincial 324, la cual es su principal vía de comunicación vinculándola al norte con Soldado Maldonado y al sur con Concepción. Se encuentra muy próxima a la reserva provincial La Florida.
Lleva el nombre de uno de los soldados caídos durante el Operativo Independencia. El pueblo nació como iniciativa de Domingo Antonio Bussi para poblar el oeste provincial donde se observaban focos de movimientos guerrilleros, la ley de creación fue promulgada el 18 de noviembre de 1976, en los terrenos del paraje Yacuchina. La apropiación de los terrenos por parte del Estado se habría logrado tras amenazas a sus dueños.