La Lluvia y granizo en la Ruta 307 sorprendió a los conductores. El fenómeno climático sorprendió a los conductores que transitaban por esa zona durante la tarde de ayer lunes.
La peculiaridad de este evento climático radica en que la lluvia y el granizo se registraron simultáneamente, algo poco común en esta región.
La Ruta 307 es una de las principales vías de comunicación que conecta Monteros con la pintoresca villa turística de Tafí del Valle. Es una ruta muy transitada por turistas y tucumanos que desean disfrutar de los hermosos paisajes que ofrecen los Valles Calchaquíes.
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Sin embargo, la tarde de ayer, los conductores se encontraron con una sorpresa inesperada. Mientras transitaban por la ruta, comenzaron a caer intensas precipitaciones que combinaban la lluvia con el granizo. Esto provocó un notable descenso en la visibilidad y dificultades para el manejo seguro de los vehículos.
Charly Miranda, un periodista tucumano, viralizó la situación en un video que luego compartió en sus redes sociales y se volvió viral en cuestión de horas.
En las imágenes se puede apreciar cómo la lluvia y el granizo golpean fuertemente el parabrisas de los autos mientras estos avanzan con precaución por la ruta. Las ráfagas de viento también son protagonistas en el video, dando cuenta de la intensidad del fenómeno.
Aparentemente, ante esta situación, algunos conductores decidieron detenerse a la vera de la ruta hasta que el clima mejorara. Esperaron dentro de sus vehículos hasta que la lluvia y el granizo cesaran.
Afortunadamente, hasta el momento no se reportaron heridos ni daños materiales de consideración a causa de este fenómeno climático. Sin embargo, sí se generaron algunos inconvenientes en la circulación, ya que la lluvia y el granizo volvieron resbaladizo el pavimento.
A medida que avanzaba la tarde, el mal clima fue cesando y los conductores pudieron continuar su camino hacia los Valles Calchaquíes sin mayores complicaciones.
Lluvia y granizo un hecho poco peculiar en la Ruta 307
Este fenómeno climático en la ruta 307 sorprendió a todos, pero también dejó una estampa hermosa y diferente en los Valles Calchaquíes. Una ocasión para tomar fotografías y disfrutar de esta inusual escena.
La lluvia y el granizo fueron los protagonistas de un hecho singular en la Ruta 307, generando sorpresa y cautivando a quienes tuvieron la oportunidad de presenciarlo. Sin duda, es un recordatorio de la imprevisibilidad de la naturaleza, la belleza y el peligro que puede esconderse detrás de un fenómeno climático.